Receta de Sopa castellana al estilo conquense

[Descubre las calorías que aporta un tradicional plato de sopa castellana]

La sopa castellana al estilo conquense es una deliciosa receta tradicional que te transportará a la cocina de antaño. Este plato reconfortante, originario de la región de Castilla, se caracteriza por su sabor intenso y sus ingredientes sencillos pero sabrosos. Es perfecto para los días fríos de invierno, ya que te calentará el cuerpo y el alma. ¡Atrévete a preparar esta deliciosa sopa y disfruta de su auténtico sabor casero!

Ingredientes necesarios

• 4 dientes de ajo
• 100 gramos de panceta o tocino
• 1 chorizo
• 1/2 barra de pan del día anterior
• 4 huevos
• 1 litro de caldo de carne
• Aceite de oliva
• Pimentón dulce
• Sal al gusto
• Perejil picado para decorar

Paso 1: Preparar los ingredientes

Comienza pelando y picando los dientes de ajo en trozos pequeños. Luego, corta la panceta o tocino en dados y el chorizo en rodajas.

Paso 2: Sofreír los ingredientes

En una cazuela grande, añade un poco de aceite de oliva y calienta a fuego medio. Agrega los trozos de ajo y sofríe hasta que estén dorados. Luego, incorpora la panceta o tocino y el chorizo, y cocínalos hasta que estén bien dorados y crujientes.

Paso 3: Añadir el pimentón

Una vez que la panceta y el chorizo estén bien dorados, es el momento de añadir el pimentón dulce. Remueve rápidamente para que no se queme y se mezcle bien con los ingredientes. Esto le dará a la sopa un sabor ahumado y característico.

Paso 4: Agregar el pan y el caldo

A continuación, corta la media barra de pan en rebanadas y añádelas a la cazuela. Remueve para que se impregnen bien con los jugos de la panceta, el chorizo y el pimentón. Luego, vierte el litro de caldo de carne y deja cocinar a fuego medio-bajo durante unos 10 minutos, hasta que el pan se haya deshecho y la sopa adquiera una consistencia espesa.

Paso 5: Cocinar los huevos

Mientras la sopa se cocina, puedes preparar los huevos. Puedes hacerlos en forma de tortilla francesa o escalfados, según tu preferencia. Si optas por la tortilla, bate los huevos en un bol y cuájalos en una sartén con un poco de aceite. Si prefieres los huevos escalfados, hiérvelos en agua con un chorrito de vinagre hasta que estén a punto.